jueves, 22 de enero de 2009

RIP DERECHOS LABORALES

Con este despido despiadado, se intenta implantar entre los trabajadores, el mismo sistema, utilizado en su momento, cuando ceso sin previo aviso a un concejal de su propio partido.

No es nueva la arbitrariedad, parcialidad y crueldad demostrada por el equipo de gobierno para con los trabajadores, pero con esta acción, se rebasa el límite de lo racionalmente tolerable y se entra en una nueva andadura que podíamos denominar de represión, venganza y terror.

Utilizar el paro como elemento de represión sindical contra todo aquel que ose manifestar sus discrepancias, es algo inaceptable.


El terror no puede ser utilizado como una forma de imposición en ninguna faceta de la vida y mucho menos en el plano laboral.


Señor Alcalde, con el pan de los trabajadores no se puede, ni se debe jugar.